La yuca (también conocida como mandioca o casava) es un tubérculo cultivado por primera vez hace más de 4,000 años en Sudamérica y se ha hecho popular a nivel mundial debido a propiedades nutricionales similares a la papa. Este producto tiene la capacidad de crecer en suelos áridos o de escasa fertilidad, así como en zonas con precipitaciones esporádicas o largos períodos de sequía, lo que le brinda una ventaja comparativa frente a otros cultivos. La yuca es rica en hidratos de carbono, algo que resulta muy positivo, pues le aporta al cuerpo un 80% de energía. La harina de yuca no está refinada, es libre de gluten por lo que es una alternativa perfecta de espesantes para celíacos, tiene un sabor neutro y por sus propiedades espesantes es útil para dar densidad a cremas, sopas, salsas, postres, etc.
Beneficios:
- Por su alto contenido en fibra dietética, la yuca y sus propiedades ayudan a disminuir los niveles de triglicéridos, contribuyendo de esta manera a una mejor función corporal.
- La yuca tiene, entre sus componentes, grandes cantidades de Vitamina K, que contribuye a la formación de masa ósea y combate la osteoporosis.
- Es una buena fuente de vitaminas B y B6 y tiene altas cantidades de folatos, hiamina, riboflavina y ácido pantoténico. La yuca también es un producto ideal para el cuidado del cabello.
- Su contenido en grasas es bastante bajo. La cantidad de calorías que se encuentran en la yuca sirven como alimento adecuado para quienes realizan un esfuerzo físico considerable, como por ejemplo, quienes trabajan en el campo, fábricas o en obras de construcción, etc.